En este trabajo relacionado con los medios, la publicidad, promoción de eventos y posicionamiento de lugares, comúnmente nos encontramos con clientes que quieran incluir en la definición de su negocio, que son los mejores, el más grande, los más buenos, los preferidos. Mi reacción silenciosa ante esto es pensar: ¿quién les dijo que eran los mejores? Aún cuando probablemente ofrecen un servicio único, la decoración de su lugar es muy original y los platillos o lo que venden, de excelente calidad. ¿Según qué o quién son los mejores?
Si tu negocio es uno de los favoritos, limítate a comunicar sus valores, o características que lo hacen ser tan especial u original. Si en verdad lo es, no será necesario que tú digas que es el mejor. Tus clientes satisfechos lo harán por ti.
No emitas juicios de valor en tus comunicados, ni en tus piezas publicitarias, mejor preocúpate por crear materiales que impacten, que se queden en la memoria, diseños agradables y contenido veraz. Tu honestidad será percibida subjetivamente, e indirectamente atraerá a más hacia tu marca.
Azanza Cervantes
THE WIZARD BLOG
@AzanzaMaria